domingo, 12 de julio de 2009

LAS SORPRESAS DE RY COODER

Han pasado 10 días y sigo igual de perplejo, la sensación de irrealidad me acompaña estos días y me sigo preguntando: ¿He visto un concierto de Ry Cooder?



Pero comencemos por la primera sorpresa, allá por el mes de mayo. Recibo una llamada de mi amigo Manuel Fernández…”Como?? Ry Cooder!! Con Flaco Jiménez, uauuuu solo falta Jim Keltner, que te pasan unas entradas???, Coño, estoy alucinando…” Uno de esos conciertos soñados.
Claro, hay más. Tom Waits, Leadbelly, Fela Kuti, Louis Armstrong, Boris Vian, Benny More….Teniendo en cuenta que la mayoría de ellos solo están para conciertos celestiales, Tom y Ry son las únicas bazas que podía jugar. Increíble, iba a hacer realidad uno de mis sueños!!


Get Rhythm, el primer disco de Ry Cooder que me enganchó y con el que comenzaba, sin saberlo, un largo viaje por musicas de todo el mundo



La segunda sorpresa llego poco antes del concierto, la semana anterior. Nadie hablaba de Ry Cooder, ni radio 3, ni en LA RUTA NORTEAMERICANA donde Fernando Navarro se había confesado enganchado a su último disco, ni Diego Manrique, ni el EP3, ni siquiera en los zoom de las 6 de la mañana, nada de nada. Ostias! Me habré equivocado y el concierto era el 1 de junio en vez del 1 de julio??? Manuel me mata, que me llamó para que lo mirara en Internet…

Pues no, 1 de julio en el Palacio de Congresos Municipal. Mas sorpresas, en el municipal?? En Parque de las Naciones, un concierto? Hay buena acústica ??
Yo pensaba que era en el de la Castellana…en fin, solo quedan unas horas.
Y allí nos plantamos, con una gran expectación, con ganas de ver algo que llevábamos toda la vida, al menos toda una vida de música, esperando oír, la increíble guitarra de Ry , considerado por Rolling Stone el octavo guitarrista del mundo.

Sentados en un banco, contemplábamos la gente, poca y variopinta que llegaba al Palacio de Congresos. Hablábamos de sus discos, desde Hawai hasta África, de Carlos Núñez a John Lee Hooker, músico inquieto, asombroso y siempre abierto. Hambriento.
Pero la entrada que puso en mi mano, llevaba una advertencia:


Nick Lowe con foto y en letras grandes, Flaco Jiménez en letras pequeñitas como invitado, muy raro.


Para continuar con las rarezas y las sorpresas, la actuación en la planta -2, cambio de sala por las pocas entradas vendidas. Nunca había visto un concierto así, sin escenario, los músicos en pleno suelo, como en un plató de televisión. Un set de batería impresionante enmarcado por detrás con un enorme gong, prometía sensaciones intensas y para ellas nos preparamos.

Después de aburrirnos un rato con la nuera de Ry haciendo pinitos de cantante indie, un pipa sacó un soporte lleno de guitarras y se puso a afinarlas con parsimonia. En ese mismo momento saltó la primera de las grandes sorpresas y no llegó del escenario-plató sino de dos filas de butacas mas arriba: Flaco estaba enfermo. Ni una nota, ni un cartel o una advertencia por el micro, un fan de Flaco se había enterado por su página web y nos lo contaba desconsolado. La mitad del sueño se caía, pero nos quedaba Ry y su guitarra.
Mejor dicho, sus guitarras, seis a cada cual mas curiosa, que el pipa definitivamente terminó de afinar con gesto cansino.

Y entonces comenzó la gran sorpresa, lo inesperado, lo que nunca hubiera imaginado de este artista: 3 músicos en escena, ninguna emoción.

Según iban pasando los minutos y las canciones, iban rompiéndose las justificaciones, “Bueno, es la primera canción, ya entraran en calor”, “ Es un mini-dobro?? Que sonido mas curioso”; “Un solo con un dedo y una cuerda??, será una extravagancia…”, “Tanto le ha afectado que no este Flaco?” “ESTA MIRANDO EL MASTIL PARA PONER LOS ACORDES!!!”
Nick Lowe trataba de ser simpático y lo conseguía, con su folk-rock para jubilados, Joachim Cooder y su fastuoso set de batería parecía contenido, adaptando el paso a la poca intensidad del concierto y Ry…donde estaba Ry??

En el colmo del desconcierto, aparecieron las coristas y nos vimos trasladados a cualquier fiesta de pueblo, “Chinito, chinito”, esto es la música latina para Ry Cooder. Increíble, después de lo que ha compartido con la gente del Buena Vista. Y el colofón, “Half a Boy & Half a Men,”, un buen rock setentero de Nick Lowe, cantado con entusiamo , en su apoteósico final es rubricado por Ry…con un tímido rasgueo.
El guitarrista que se enfrentó a Steve Vai de forma magistral en el duelo final de Cross Roads. Asombroso. Un rasgueo.


A partir de la mitad del concierto es evidente nuestra decepción, ¿Esta muy mayor?, ¿Enfermo? ¿Pasa de tocar?¿Es vox populi que ya no es el que era y por eso nadie hablaba de este concierto? ¿Ese tipo con camisa hawaiana y sombrero es un mal clon y el verdadero Ry esta perdido por un desierto en Argentina, tocando sonatas de Mozart con gauchos mal encarados y salvajes? Dios, se me va la olla…

Al publico le gustó, complaciente se dejó llevar por las rancheras y los temas Tex Mex, pidió un bis y le regalaron “Little Sister” y “How Can A Poor Man Stand Such Times And Live”, ovacionó a los músicos y hasta alguna cuarentona quiso tirarse al cuello del guapo Nick, ( unos gorilas Tipo-Los -Soprano se lo impidieron, claro está. Muy decorativos uno a cada lado de la escena toodo el concierto, sentados en una silla como enormes jarrones chinos)

Manuel y yo nos mirábamos con el mismo pensamiento bailando en nuestros cerebros: aquello no era ni el 5 % de lo que podía ser. Si, no sonaba mal, pero conociendo el talento y la música de Ry Cooder, es como ir comer al Bulli y que te pongan en un plato una lata de sardinas abierta y un trozo de pan. Estas en el Bulli, pero su exquisita y emocionante gastronomía no está. Estábamos en las canciones de Ry, pero apenas un pellizco de su genio asomaba por el extremo de la lata.
Ni la cervecita de rigor para comentar la jugada, directos a la M-40, camino de casa
con un pensamiento instalado ya en mi cabeza: ¿He visto un concierto de Ry Cooder?


Para desagraviarnos y quitarnos este mal sabor de boca, esta oportunidad perdida, nos vamos a dar el gusto de hacer un ESPECIAL RY COODER, si os apetece participar ya sabéis, elcallejondelhambre@mail.com

No hay comentarios: